La plaza Peris

Las Germanías valencianas fueron un importante movimiento social y político que entre 1519 y 1523 surgió en un contexto de crisis con una explosión de descontento contra la nobleza y sus gobernantes.

La mecha que provocó la revolución fue el ataque de las oligarquías a los gremios y la respuesta de estos protestando contra la desigualdad. Poco después la revolución tomaría forma y “els agermanats” derrotaron militarmente la alianza de fuerzas formada por las oligarquías y la corona hispánica creando una junta con representantes de varios gremios.

Pronto, sin embargo, surgieron las primeras desavenencias entre “els agermanats”. El radical y "velluter" Vicente Peris, alcanzó el liderazgo tras la muerte del moderado Joan Llorens. En ese punto la revuelta adopta una evolución ideológica, desde un carácter reivindicador político y comercial de la burguesía a una revolución de clases generalizada. Peris se introdujo clandestinamente en València para negociar una paz, pero fue detenido y encarcelado y en marzo de 1522, ejecutado. Sin embargo, la historia no acaba aquí y tiene su reflejo curioso en el callejero.

¿Dónde vivía? En la calle de Gracia, actual Músic Peydró, esquina con Carabasins, actual Padilla. Cuentan que allí Peris fue apresado por las tropas del Virrey y llevado a rastras por la calle de Gracia hasta la plaza del Mercado donde fue ahorcado y posteriormente descuartizado. También existen referencias que indican que su cabeza estuvo mucho tiempo colocada en el portal de San Vicente, a modo de advertencia para su correligionarios.

Pero no acabó ahí la cosa, pues las autoridades mandaron derribar su casa, que el suelo fuera sembrado de sal y para memoria de su castigo se ordenó que no se levantara casa ninguna en ese lugar, por lo que quedó un curioso “bocado” en forma de plaza, que fue conocida como “Galindo” para en 1923 pasar a ser, en reconocimiento, plaza Peris.

En 1882 el ayuntamiento había rotulado con su nombre la graciosa “calle del estornudo”, actual Micer Tarazona. La plaza Vicente Peris sucumbió a la avenida del Oeste pero sigue existiendo hoy y sobrevive en el barrio de Marxalenes.