El Nano d'En Llop

¿Conoces la historia del “El Nano del Carrer En Llop”?

Hasta los años veinte del siglo pasado, cuando caminábamos por el Carrer d’En Llop era imposible no detenerse o mirar una curiosa escultura que se alzaba en la pared de una vivienda. Estamos hablando del que fuera conocido como “el nano del carrer d´en LLop”. Esta figura era más que una estatua de piedra abrazada a una columna junto al portal de una casa, era un auténtico símbolo de la ciudad. Repre­sentaba a un hombre semidesnudo y con las nalgas descubiertas y mirando hacia la calle en actitud maliciosa.

Este “nano” tuvo su origen en la rencilla surgida entre Francisco Castillo y Lorenzo Merita, que eran además vecinos, pues les separaba la citada Calle de “En Llop”. Estos dos habían sido invitados a Madrid para el acto de la Jura del Príncipe de Asturias y después rey de España, Carlos IV, pero al regreso a Valencia uno volvió ennoblecido y el otro no.

De este modo Castillo adquirió el título de Marqués de Jura Real, por lo que Merita se consideró agraviado. Tiempo después, el primero se empeñó en comprar la casa del segundo para hacer la carrocería de su palacio, cosa que nunca consintió su dueño. Y no quedó ahí la cuestión, pues Merita, como burla, hizo colocar la famosa estatua de cara a una de las puertas de su palacio, para que lo recordara siempre en forma burlona. Con los derribos para la creación de la actual Plaza del Ayuntamiento, esta figura fue desmontada y llevada a una casa particular en La Cañada, donde permanece en un chalet.