Casas Natalicias

Cuando paseamos por la ciudad muchas veces no nos percatamos de la historia que nos ofrece. Existen en València numerosas casas donde nacieron ciudadanos ilustres, algunos más conocidos, otros menos, pero todos en su conjunto muestran una necesidad por parte de la ciudadanía de destacar este hecho en forma de placa laudatoria.

Empezamos nuestro recorrido por la casa de Joaquín Sorolla en la Calle de las Mantas, aunque cuando nació era conocida como Calle Nueva. Como en muchas ocasiones, son las comisiones falleras las que se encargan de rotular estas placas, así hizo la Falla de Plaza Lope de Vega en 1978. El edificio en el que está colocada es nuevo y como en muchas otras ocasiones, se perdió la oportunidad de utilizarlo como casa-museo. En su lugar hay apartamentos turísticos.

En el barrio del Carmen encontramos casas natalicias de personajes tan importantes como el artista Josep Renau y Mariano Benlliure, ambos vecinos de la Calle Baja

Dentro del mundo religioso encontramos a varios Santos como San Vicente Ferrer, San Pedro Pascual o San Luís Beltran y religiosos como el Beato Nicolás Factor. Destacamos aquí al principio de la Calle Serranos al “Pare Tosca”, matemático y padre de la cartografía valenciana moderna.

La única casa natalicia que actualmente es una casa-museo visitable es la de la cantante Conchita Piquer. Otros nombres que encontramos son los de Martín Mengod, catedrático, concejal y periodista, el músico Manuel Penella, el rector José Monserrat, los poetas Rafael Ferrer Bigné y Carles Salvador, el abogado Alberto García Esteve, el actor Ismael Merlo, el Marqués de Campo o el Ministro Cristóbal Sorní, entre otros.

Se da una curiosa circunstancia que dice mucho del afán destructivo que en muchas ocasiones nos caracteriza y es la frase: “Aquí estaba la casa donde nació…” Y es que muchas de las casas de valencianos tan importantes como el maestro Salvador Giner, el escultor Mariano Benlliure, el Pintor Joaquín Sorolla o el Novelista Blasco Ibañez están desaparecidas y en ocasiones hasta ni existe la calle como en este último caso con la inexistente calle de la Jabonería Nueva.