Calle Concordia

¿Sabías que hay una calle que nos recuerda a la iglesia de San Bartolomé?

Hemos hablado de la antigua iglesia de San Bartolomé. No solamente han quedado las puertas y la torre sino que en el recuerdo queda alguna señal en el nombre de la calle en la que se encontraba su puerta principal.

Estamos hablando de la Calle Concordia. Se denomina así porque sobre la puerta principal de la iglesia de san Bartolomé existió una gran hornacina con una imagen de la “Virgen de la Concordia”, ya que de esta manera se conocía a aquellas imágenes religiosas que estaban sufragadas por una “Concordia” que eran agrupaciones de devotos que sostenían el gasto de una pequeña capilla que solían tener en la calle bajo una determinada advocación. Nunca les faltaba algún adorno de flores y de noche el indispensable farolillo, cuya iluminación sostenía el barrio y que en muchas ocasiones era la única luz de la que disponía la calle.

Estos altares, tan abundantes antiguamente en las encrucijadas de las pequeñas calles se conocían como “concordias”. No obstante, la advocación que más se divulgó de esta imagen en particular fue la de la “Mare de Deu Grossa de San Bartolomé”. Con la iglesia también se perdió parte del nomenclátor que la acompañaba. De esta manera desaparecieron los nombres de la Calle de la Abadía de San Bartolomé, actual Calle de los Borja, la Calle del Cementerio de San Bartolomé, que ocupaba el último tramo de la actual Calle Portal de Valldigna y por supuesto la Plaza de San Bartolomé, que actualmente forma parte de la Plaza Manises, ya que su configuración ha cambiado bastante a lo largo de los años y que indico en el plano del Pare Tosca con una flecha.