Aldabas

¿Te has fijado en la posición de las aldabas de muchas puertas de palacios medievales en València?

Ya hemos hablado anteriormente de otros elementos de las puertas palaciegas relacionados con los carros de caballos, como aquellas piedras o hierros que se colocaban para evitar dañarlas con los carruajes o las esquinas retranqueadas para que giraran los mismos

La palabra “aldaba” proviene del árabe antiguo “aḍ-ḍabbah”. Significa literalmente ‘lagarta’, por su forma, aunque se refiere más bien al cerrojo que sirve para cerrar las puertas, de hecho, con esta palabra se lo conoce actualmente en el mundo árabe.

Antiguamente, las aldabas servían para cerrar la puerta, aunque con el tiempo, se utilizarían tan solo para golpearlas, a modo de llamador. Su iconografía es variada, de hecho con el desarrollo del hierro encontramos formas muy pintorescas y curiosas, muchas veces de animales, encargadas por los propios dueños, con relación con los oficios del propietario o que se llevaban a cabo en la casa en cuestión. Una de las más extendidas sería el puño, pero encontramos de muchos tipos. Hay aldabas muy famosas por su significado en La Lonja o en las Torres de Serranos.

Pero si nos fijamos, podemos ver algunas casas con dos y hasta tres aldabas y en posición vertical. Esto es debido a que la gente que llegaba a caballo necesitaba llamar a la puerta sin descabalgar. De esta forma encontramos dos o tres aldabas, a la altura de los peatones y otras más altas para los que llegaran a caballo y quisieran entrar con el animal.