Para hablar de este convento, a diferencia de otros en la ciudad, no hace falta tirar de una gran imaginación. Parte del mismo sigue existiendo, el problema es que está en otro lugar. Es el antiguo convento de Santa Catalina de Siena. Su fecha de fundación no es casual: 1491. Justo un año después se produjo la expulsión de los judíos y esta iglesia precisamente se levantó sobre el lugar que ocupaba su antiguo cementerio. De hecho, la actual plaza de los Pinazo se conocío como Fossar dels Jueus, así como la puerta llamada “de los Judíos” también debe su nombre al vecino camposanto. En ese mismo periodo se levantaran importantes edificaciones en esta zona de la ciudad otrora hogar de los judíos, como la Universidad de Valencia, fundada en 1499. Justo cien años antes de la construcción del convento, en 1391 se produjo el asalto a la judería, hecho que dejó muy mermada a la población semita que huyó a poblaciones como Sagunto. En ese lugar, antes de la creación del convento se levantó una pequeña iglesia para que los judíos “conversos” demostraran sus creencias cristianas. Esta capilla fue el embrión del convento.

Después de algunas reformas, la riada de 1957 supuso un punto de inflexión y las religiosas, antes de reformar, prefirieron poner en venta el solar y en 1968 se produjo la transacción al Corte Inglés, con la intención de levantar la que iba a ser la tienda más grande de la compañía. Las monjas, con el dinero fresco de los empresarios, levantaron un nuevo convento en Paterna.

Sin embargo, se valoraron los bienes patrimoniales y el ayuntamiento se vio obligado a “salvar” la operación, prometiendo el traslado de la iglesia, pero esta no pudo transportarse íntegramente, ya que pese a que las piedras se numeraron y colocaron de nuevo, los muros eran de mampostería, así que se reconstruyeron manteniendo las mismas proporciones. Esta iglesia se trasladó al barrio de Orriols. Y hay otra curiosidad ya que la original solo tenía una entrada, pero en la nueva ubicación vemos dos. ¿De dónde sacaron la otra? Pues de otra iglesia, la de San Sebastián que se retiró para facilitar el tráfico de los coches por la calle Quart.